Tom Requiem
Chapter III
Gretel and Do arrived at the Circus, Dark side of Oz. In the front door there was a man with the made up face inviting to all to enter the spectacle while a dwarf seated on his feet, sold the tickets. Until they did not arrive almost at the door, they did not see that his skin was black, smooth, muscular and painted with ritual symbols. He had white painted face with a malignant black smile.
- Come and see, spectacle never seen. Beautiful women and brave men facing the death.
- Two tickets, please. Gretel said directly while she took out her wallet from her bag.
- Here we have to two beautiful very brave little women.
That comment made her smile funny, while Do looked at her with scepticism.
- Your friend does not look quite convinced to enter.
- She prefers something more into horror.
- Ringu, give them two tickets for the Parade to hell. Although we will do it like a special favour because I am afraid that you tow are not 18 years old...
- But almost we are! Do interrupted to him with avidity. Tom Requiem, that was the name of the master of ceremonies, loosen a great outburst of laughter. Do didn´t look at him to his eyes. Her body attracted her: great, sweated, painted. He shook his plain top hat as a reverence while he stared her maliciously.
- Get closer and I will tell you a secret. Do approached shyly.
- At twelve o´clock we closed the doors but the celebration is still inside. When you leave, come with your friend and we have a drink while I show you the hell.
Those words shocked her, hands sweated and noticed as something inside her shrank the stomach and hardened her nipples. Gretel and Do entered the parade, but Do thought about Tom and his words...
Capítulo III
Gretel y Do llegaron al Circo, al Lado Oscuro de Oz. En la puerta había un hombre con la cara maquillada invitando a todos a entrar en el espectáculo mientras un enano sentado a sus pies, vendía las entradas. Hasta que no llegaron casi a la puerta no vieron que su piel era negra, lisa, musculosa y pintada con símbolos rituales. Tenía la cara pintada de blanco con una sonrisa maligna en negro.
- Pase y vean, espectáculo nunca visto. Hermosas mujeres y valientes hombres enfrentándose a la muerte.
- Dénos dos entradas. Dijo Gretel decidida mientras sacaba el monedero del bolso.
- Aquí tenemos a dos hermosas mujercitas y muy valientes también.
Aquel comentario le hizo sonreír coqueta, mientras Do miraba con escepticismo.
- Tu amiga no parece muy convencida a entrar.
- Ella prefiere algo más terrorífico.
- Ringu, dales dos entradas para el desfile al infierno. Aunque lo haremos como un favor especial porque me temo que no tenía 18 años…
- Pero casi los tenemos! Le interrumpió Do con avidez.
Tom Réquiem, que así se llamaba el maestro de ceremonias, soltó una gran carcajada. Do le miraba de reojo. Su cuerpo le atraía: grande, sudoroso, pintado. Agitaba su sombrero de copa a modo de reverencia mientras le miraba malicioso.
- Acércate y te diré un secreto. Do se acercó tímidamente.
- A las doce cerramos las puertas pero la fiesta sigue dentro. Cuando salgas, ven con tu amiga y nos tomamos algo mientras te enseño el infierno.
Aquellas palabras se le grabaron en la mente, las manos le sudaron y notó como algo dentro suyo le encogía el estómago y le endurecía los pezones.
Gretel y Do entraron en el desfile, pero Do pensaba en Tom y sus palabras…
0 Comments:
<< Home